En primera línea frente al Covid-19

Por EQUIPO AICTS / 23 de marzo de 2020


La crisis del Covid-19 avanza diaria y semanalmente en nuestros países. En estos momentos, los escenarios que se están perfilando en Estados Unidos, México y el resto de América son complejos. En España, como en Italia hace unas semanas, estamos en una tendencia de ascenso de la curva, tanto de afectados como de fallecidos. Es un momento clave como sociedades y, en función de las respuestas que demos a esta crisis, se perfilará otro modelo de sociedad. Lo que no sabemos es si será más humana, si seremos capaces de crear nuevos modelos de sociabilidad menos desiguales que los derivados del neoliberalismo y de la fase en la que nos encontramos del capitalismo, apoyado en las Tecnologías de la Información y la Comunicación; o si, por el contrario, ese mismo modelo tendrá una mayor expansión gracias a esta crisis sin precedentes. No podemos dar respuesta a esa pregunta, lo que sí que tenemos claro desde AICTS es en el lado en el que estaremos, en el primero.

Esta reflexión viene por el hecho de que la crisis pandémica está poniendo de relieve numerosas contradicciones del sistema, y una de ellas y muy importante es la que hace referencia a las personas que se encuentran en primera línea frente a la pandemia. Numerosos autores desde diferentes ámbitos, del Periodismo a la Filosofía y pasando por la Sociología, entre otras, han puesto de manifiesto este hecho. Primero, con los profesionales de la Sanidad que están haciendo un esfuerzo ingente. Son profesionales que han vivido años de recortes y de precariedad, a raíz de la crisis de 2008, de medidas neoliberales y privatizadoras. Pero consideramos que tendremos tiempo de analizar esta cuestión más adelante. Además, junto a médicos, hay enfermeras y enfermeros, celadores, limpiadores y limpiadoras, etc Y no podemos dejar de señalar a las personas que trabajan en residencias de personas mayores, las personas que atienden a la dependencia, auxiliares de atención domiciliaria, etc... Algunos de estos colectivos no están precisamente en la parte más alta de la pirámide social.

Y lo mismo podemos decir para los trabajadores y trabajadoras de tiendas y supermecados, personas que trabajan en gasolineras, camioneros, en otros puntos determinantes para que la sociedad siga funcionando, así como muchas personas que van a sus lugares de trabajo. Son personas que, en no pocas ocasiones, han sido víctimas de precarizaciones en sus condiciones de trabajo. Muchos y muchas de ellas tendrán hijos e hijas, tendrán que dejarlos en casa o tendrán que organizarse si son pareja para que uno se quede y otro vaya a trabajar. Peor escenario tienen las familias monoparentales, generalmente encabezadas por mujeres. Y no podemos dejar de referirnos a los autónomos y autónomas, una parte muy importante de ellos y ellas han perdido sus trabajos, encargos, etc.

Pero volvemos a las personas que están en esa primera línea. Es muy paradójico este escenario, trabajadores y trabajadoras que están manteniendo nuestras sociedades y que están haciendo una labor que nunca podremos recompensar. Pero lo que sí podemos hacer es valorar estas personas y estas profesiones. Eso es lo que nunca tuvimos que perder, y lo perdimos, como sociedad. Por otra parte, y como decía Marina Garcés en el programa del domingo 22 de marzo de Jordi Évole en La Sexta, la crisis del Covid-19 tiene una dimensión social y clasista. Y es cierto. Es un reflejo también de la desigualdad. De esta forma, nos encontramos con personas que, a través de sus Redes Sociales, muestran sus confinamientos y las actividades que hacen, sus recursos y medios. Es un reflejo del individualismo y de la vanidad de nuestro tiempo. Si eres afortunado o afortunada de poder quedarte en casa, de poder hacer teletrabajo, de poder atender a tus hijos e hijas, de no exponerte al riesgo de infectarte...Hay imágenes que resultan muy dolorosas por insolidarias y por falta de solidaridad. Todos y todas no estamos afrontando de la misma manera esta situación, ni las consecuencias van a ser las mismas para todos y todas. Tenemos que tenerlo en cuenta para lo que venga. Nuestro homenaje y agradecimiento a todas las personas que están en primera línea frente al coronavirus y los que hacen que nuestra sociedad siga funcionando. Mil gracias.